lunes, 2 de noviembre de 2009

DE LA CONFRONTACIÓN ESTÉRIL AL PACTO EDUCATIVO PARA LIBRAR AL CHACO DE TODA CLASE DE ANALFABETISMOS

Por Francisco Romero Ministro de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología1. Hacia la Síntesis entre el respeto de los derechos de los estudiantes y el de sus docentes. “Del laberinto se sale sólo por arriba”, escribía Leopoldo Marechal y esta frase es la más adecuada para responder –desde la serenidad, la reflexión y una mirada que se preocupe y ocupe de la totalidad de derechos y obligaciones que tienen todos los actores de la comunidad educativa (Estado, Trabajadores de la Educación, Estudiantes y Padres, fundamentalmente)– a quienes sólo conciben la lucha por sus legítimos derechos de modo corporativo, sin incluir a todos los actores de la comunidad educativa, a través de la confrontación estéril –cuyo resultado es suma cero– y el discurso del agravio y descalificación personal. Quien vuela bajo se estrella con facilidad, porque confunde su microclima de percepción de la realidad, con lo que la comunidad educativa en su gran mayoría, trabajadores de la educación, padres y estudiantes piensan y necesitan de todos nosotros. Esto no nos podemos ni debemos permitir quienes, desde distintas responsabilidades, lejos de agraviarnos, debemos dar el ejemplo, priorizando el Diálogo como espacio y método para la resolución de problemas. Ésa es una Cultura, ésa es una Educación en el respeto de las diversidades y pluralidades, que los que somos actores institucionales y sindicales debemos honrar para unirnos detrás de una Política de Estado, que incluyendo las demandas sectoriales, las supere en una Síntesis que privilegie la Defensa integral de la Escuela Pública, del Derecho Social a la Educación como gran razón de Estado capaz de unirnos a todos los chaqueños, ya hastiados-defraudados de una subcultura del enfrentamiento mediático, tan inconducente como desmovilizador de las energías que debemos poner en buscar acuerdos estratégicos para resolver problemáticas muy complejas que, al demandar Políticas de mediano y largo plazo, requieren de concebir a la Educación como el GRAN ÁMBITO DE CONSENSO DEL CHACO.

Por eso no responderemos a ningún agravio con otro agravio, sino con convocatorias a diálogos y hechos que tiendan a dignificar tanto las condiciones laborales de los trabajadores de la educación como los derechos de estudiantes y padres a recibir la cantidad y calidad de clases que necesitan para su inclusión cultural ciudadana. El Chaco no puede darse el lujo de que el sistema educativo se naturalice como un laberinto en el que por no mirar por encima de la coyuntura y las diferencias, los agravios y las descalificaciones, lo corporativo y la fragmentario, PRIVEMOS A NUESTRO PUEBLO DE UNIRNOS PARA ENFRENTAR y SUPERAR, ENTRE TODOS, con inteligencia, planificación y coraje, las distintas clases de analfabetismos que hoy padece nuestro Chaco.

2. Avanzar en la Agenda de Coincidencias, atender y dialogar sobre la Agenda de Diferencias
En la Carta Abierta que dirigí a la Comunidad Educativa hablé de dos caras de una misma realidad. Por un lado, nos sentimos orgullosos de que tanto a nivel nacional como provincial se haya avanzado en una política de inversión educativa que permitió tanto a nivel de recomposición salarial como de infraestructura, equipamiento, provisión de becas, útiles, libros y de retención escolar, empezar a reparar una Deuda Histórica para con la Educación Pública tras más de tres décadas de progresiva desresponsabilización del Estado del sistema educativo. En tal sentido, el año próximo el Ministerio de Educación de la Nación alcanzará la meta de 6 puntos del Producto Bruto Interno, tal como lo recomienda la UNESCO como piso presupuestario. En tanto, en la Provincia, partimos en diciembre de 2007 de un presupuesto educativo inferior al 31 por ciento y hoy alcanza el 37, es decir que se cumple, por primera vez, y sobradamente, con el artículo 83 de la Constitución Provincial, que sostiene que el presupuesto educativo no podrá ser inferior al 33 por ciento, objetivo que la gran mayoría de los sindicatos se planteaba hace dos años como eje de sus planes de lucha. En 20 meses se produjo una recuperación del salario docente en un 62% –la máxima inversión realizada en términos salariales de todos los trabajadores del Estado chaqueño y la mayor producida en 18 años–, y una inversión en infraestructura como jamás se conociera en nuestra historia provincial.
Este año, que la crisis financiera internacional más fuerte que conociéramos desde 1929, golpea las finanzas de todo el mundo, y la Argentina y Chaco no escapan a dicha crisis, necesitamos que se valorice dicho esfuerzo y aunemos solidariamente inteligencias y fuerzas para avanzar, racional, responsablemente, en el Diálogo de la recomposición salarial 2010, porque estamos plenamente convencidos de la indispensable dignificación de las condiciones laborales de los trabajadores de la Educación.
Sin
embargo, todas estas son condiciones necesarias pero no suficientes para mejorar la calidad educativa en nuestras escuelas, asignatura pendiente que todavía no se ha resuelto ni nacional ni provincialmente. El último Operativo Nacional de Evaluación, realizado en diciembre de 2007, en las áreas de Lengua, Matemática, Ciencias Sociales y Ciencias Naturales, arrojó como resultados una media nacional de 55/100 y en el Chaco, 35/100.
Estamos en riesgo pedagógico desde hace tiempo y esto no es responsabilidad de una sola gestión. Por lo menos el cincuenta por ciento de nuestros estudiantes son analfabetos funcionales porque no pueden comprender con claridad lo que escuchan y leen ni hacerse comprender a través del habla y la escritura, tal como lo atestiguan los exámenes de ingreso en las universidades y las clases introductorias en los Institutos de Nivel Superior, y las Cámaras de Comercio, la Federación Económica y el CONES, en relación a la ausencia de mano de obra calificada. Y lo son porque no son lectores, porque la Escuela todavía no retomó la exigencia de que la lectura en cantidad y calidad no es una opción, sino una meta indelegable a lograr. Esto y las grandes dificultades para razonar desde las operaciones básicas impiden el desarrollo del pensamiento lógico, obturan la posibilidad de pensar por propia cuenta, es decir, maleducan como no ciudadanos.
Ya describí en la Carta Abierta mencionada, lo que entiendo por las causas fundamentales de este fenómeno y aclaré que no visualizo en los docentes los chivos expiatorios del mismo. Fueron, son víctimas de la ausencia por décadas de Planificación de la Formación Docente Continua. Pero no es menos cierto, que dado que nuestro principal instrumento de trabajo es el conocimiento y éste lo defendemos en el aula, dando clases, y dándolas bien, tenemos una cuota de responsabilidad, porque así como tenemos derechos, poseemos obligaciones. Y éstas no se están cumpliendo en buena medida, porque así como hay en todo el Chaco muy buenos y buenos docentes que sostienen la Escuela Pública, con talento y valentía, no podemos ocultar de que en los últimos tres meses, sobre un total de 35 horas semanales de clases, en semanas en las que no hay paro, se están cumpliendo sólo 8 horas en Secundaria y 12 en Primaria. Sin abrir juicios de valor a priori, con el afán de comprender lo que pasa y no estigmatizar al actor docente, interpretar para resolver exige que se incorpore este tema en la Agenda de

No hay comentarios: