
Cuando promediaba el primer tiempo el arquero de Boca, Abbondanzieri logró atajarle un penal al “burrito” Ortega. Pero el millonario se fue al entretiempo con una ventaja de 1 a 0, gracias a la magnífica pegada del “muñeco” Marcelo Gallardo, quién aprovechó un tiro libre para clavarla en un ángulo. En el segundo tiempo el Xeneize se mostró superior a su rival, obligándolo a retrasarse en el campo de juego, hasta que a los 19´ del complemento, Palermo de zurda sentenció el 1 a 1 definitivo.
Al minuto de juego del segundo tiempo, el lateral de River Plate, Cristian Villagra le fue duro a un rival y como consecuencia el árbitro Laverni le mostro la segunda amarilla para que se vaya a las duchas antes de tiempo. Cinco minutos más tarde, en una confusa jugada, el central de Boca Julio Cáceres le aplicó un manotazo al “burrito” y vio la roja directa.
Sin demasiadas luces, el superclásico finalizó una vez más igualado y ambos equipos dejaron una pálida imagen.
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